La permanencia de 23 de los 28 imputados en el caso Brinks en la Cárcel de Rancagua es motivo de alerta para Gendarmería, que advirtió sobre elalto riesgo de que estos investigados, quienes presuntamente conforman una asociación criminal, pudieran tomar control de los módulos de reclusión. La advertencia fue emitida luego de que la Fiscalía Regional solicitara al Juzgado de Garantía de Rancagua el traslado de los detenidos a otros recintos penitenciarios del país, petición que fue rechazada por el tribunal local. Ante esto, Carlos Fuentes, fiscal jefe regional de Análisis Criminal, expresó su preocupación por el riesgo que implica la presencia de los imputados en el penal.El riesgo es bastante alto. Gendarmería está tratando de resguardar no solo a los internos de la causa, sino que también al resto de los reclusos y la seguridad del recinto, afirmó. Según el persecutor, la naturaleza de la organización criminal podría derivar en una toma de control de los módulos, generando un estado depaz interna en el penal que facilitaría el tráfico de sustancias y el riesgo de corrupción de funcionarios. Por otro lado, María Paz Aguilera, abogada defensora de cinco de los imputados, argumentó que el arraigo familiar de sus representados justifica su permanencia en Rancagua.Nuestros representados tienen sus redes familiares en esta región, y el régimen penitenciario establece la importancia de que estén cerca de sus familias, destacó Aguilera, quien también mencionó el impacto que el traslado tendría en los hijos de los detenidos. Asimismo, la defensa cuestionó además la falta de fundamentación en la solicitud de la Fiscalía, señalando que el tribunal consideró insuficiente la evidencia presentada para autorizar el traslado. En este contexto, se ha solicitado una audiencia para debatir la competencia del tribunal de Rancagua en este caso, la cual se realizará el próximo 28 de noviembre. La Fiscalía, en tanto, sostiene que el robo a la empresa Brinks, del cual se han recuperado solo 200 millones de los cerca de 12 mil millones de pesos sustraídos, fue planificado desde el interior de la Cárcel de Rancagua. Entre los imputados se encuentran también cinco carabineros, quienes actualmente cumplen prisión preventiva en un anexo en la Subcomisaría Pudahuel Norte, en la Región Metropolitana.
Este viernes por la tarde, el Juzgado de Garantía de Rancagua decretó prisión preventiva para los dos últimos detenidos en el violento y millonario robo a una sucursal de Brinks en la ciudad, ocurrido el pasado 23 de agosto. Los imputados son un padre y su hijo, quienes, según la Fiscalía, desempeñaron roles cruciales en el delito. De acuerdo con la Fiscalía, los detenidos facilitaron un sitio para el cambio de vehículos en los que se transportaban los más de 12 mil millones de pesos robados y participaron en la eliminación de pruebas. La jueza Jessica Bascuñán detalló durante la audiencia que ambos reconocieron su participación en la recepción y ocultación del vehículo que trasladaba el dinero, así como en la destrucción de evidencias. La jueza Bascuñán argumentó que, debido a la gravedad de los delitos y la pena asignada por la ley, la prisión preventiva es una medida proporcional y justificada para estos imputados. La medida se aplica por considerar el peligro que representan para la seguridad de la sociedad.
Este miércoles, el Juzgado de Garantía de Rancagua determinó que los 18 detenidos por el millonario robo a la empresa de valores Brinks, ocurrido el pasado 16 de agosto en la Región de O'Higgins, quedarán en prisión preventiva durante los próximos ocho meses, plazo fijado para la investigación. El robo, llevado a cabo con una planificación sofisticada, incluyó la quema de vehículos en puntos estratégicos de la ciudad para distraer a las autoridades. La jueza de Garantía argumentó que, considerando la cantidad de delitos investigados, la gravedad de estos, el número de implicados y las penas asignadas, la prisión preventiva es una medida necesaria y proporcional para garantizar la seguridad pública. Además, se destacó que 12 de los 18 imputados tienen condenas anteriores. El fiscal regional de O'Higgins, Aquiles Cubillos, sostuvo que la medida cautelar es esencial y está respaldada por la evidencia recopilada en la investigación. Cubillos también indicó que el Ministerio Público está investigando la posible existencia de funcionarios de Carabineros involucrados en el robo y que se están explorando todas las hipótesis sobre el paradero del dinero robado. La prisión preventiva de los imputados busca garantizar que no interfieran con la investigación y evitar riesgos para la seguridad de la sociedad. La investigación sigue en curso para identificar a todos los posibles partícipes del delito y recuperar los fondos sustraídos.
Este martes se llevó a cabo la formalización de 18 personas detenidas por su presunta participación en el robo a la sucursal de la empresa de valores Brinks en Rancagua, ocurrido el pasado viernes. La audiencia reveló detalles sobre la banda criminal, descrita por el Ministerio Público como una “organización criminal interregional” con una estructura “jerarquizada y permanente”. El fiscal regional de O’Higgins, Aquiles Cubillos, presentó los antecedentes del caso ante el tribunal en colaboración con el equipo especializado del OS9 de Carabineros. Cubillos detalló que la banda llevó a cabo múltiples reuniones para planificar el atraco, que resultó en un botín superior a $12 mil millones, monto que aún no ha sido recuperado. Durante el operativo, la banda coordinó la quema de varios vehículos en puntos estratégicos de la ciudad para facilitar su huida, interrumpiendo el tránsito y desviando la atención de las autoridades. En total, se utilizaron 21 vehículos, de los cuales siete fueron incendiados. La investigación preliminar sugiere que la banda estaba compuesta por entre 25 y 30 personas, cada una con un rol específico en la ejecución del plan. Los 18 detenidos enfrentan cargos que incluyen robo con intimidación, asociación criminal, porte ilegal de arma prohibida, siete delitos de incendio, porte de elementos incendiarios, y 19 delitos de receptación de vehículos motorizados.
La permanencia de 23 de los 28 imputados en el caso Brinks en la Cárcel de Rancagua es motivo de alerta para Gendarmería, que advirtió sobre elalto riesgo de que estos investigados, quienes presuntamente conforman una asociación criminal, pudieran tomar control de los módulos de reclusión. La advertencia fue emitida luego de que la Fiscalía Regional solicitara al Juzgado de Garantía de Rancagua el traslado de los detenidos a otros recintos penitenciarios del país, petición que fue rechazada por el tribunal local. Ante esto, Carlos Fuentes, fiscal jefe regional de Análisis Criminal, expresó su preocupación por el riesgo que implica la presencia de los imputados en el penal.El riesgo es bastante alto. Gendarmería está tratando de resguardar no solo a los internos de la causa, sino que también al resto de los reclusos y la seguridad del recinto, afirmó. Según el persecutor, la naturaleza de la organización criminal podría derivar en una toma de control de los módulos, generando un estado depaz interna en el penal que facilitaría el tráfico de sustancias y el riesgo de corrupción de funcionarios. Por otro lado, María Paz Aguilera, abogada defensora de cinco de los imputados, argumentó que el arraigo familiar de sus representados justifica su permanencia en Rancagua.Nuestros representados tienen sus redes familiares en esta región, y el régimen penitenciario establece la importancia de que estén cerca de sus familias, destacó Aguilera, quien también mencionó el impacto que el traslado tendría en los hijos de los detenidos. Asimismo, la defensa cuestionó además la falta de fundamentación en la solicitud de la Fiscalía, señalando que el tribunal consideró insuficiente la evidencia presentada para autorizar el traslado. En este contexto, se ha solicitado una audiencia para debatir la competencia del tribunal de Rancagua en este caso, la cual se realizará el próximo 28 de noviembre. La Fiscalía, en tanto, sostiene que el robo a la empresa Brinks, del cual se han recuperado solo 200 millones de los cerca de 12 mil millones de pesos sustraídos, fue planificado desde el interior de la Cárcel de Rancagua. Entre los imputados se encuentran también cinco carabineros, quienes actualmente cumplen prisión preventiva en un anexo en la Subcomisaría Pudahuel Norte, en la Región Metropolitana.
Este viernes por la tarde, el Juzgado de Garantía de Rancagua decretó prisión preventiva para los dos últimos detenidos en el violento y millonario robo a una sucursal de Brinks en la ciudad, ocurrido el pasado 23 de agosto. Los imputados son un padre y su hijo, quienes, según la Fiscalía, desempeñaron roles cruciales en el delito. De acuerdo con la Fiscalía, los detenidos facilitaron un sitio para el cambio de vehículos en los que se transportaban los más de 12 mil millones de pesos robados y participaron en la eliminación de pruebas. La jueza Jessica Bascuñán detalló durante la audiencia que ambos reconocieron su participación en la recepción y ocultación del vehículo que trasladaba el dinero, así como en la destrucción de evidencias. La jueza Bascuñán argumentó que, debido a la gravedad de los delitos y la pena asignada por la ley, la prisión preventiva es una medida proporcional y justificada para estos imputados. La medida se aplica por considerar el peligro que representan para la seguridad de la sociedad.
Este miércoles, el Juzgado de Garantía de Rancagua determinó que los 18 detenidos por el millonario robo a la empresa de valores Brinks, ocurrido el pasado 16 de agosto en la Región de O'Higgins, quedarán en prisión preventiva durante los próximos ocho meses, plazo fijado para la investigación. El robo, llevado a cabo con una planificación sofisticada, incluyó la quema de vehículos en puntos estratégicos de la ciudad para distraer a las autoridades. La jueza de Garantía argumentó que, considerando la cantidad de delitos investigados, la gravedad de estos, el número de implicados y las penas asignadas, la prisión preventiva es una medida necesaria y proporcional para garantizar la seguridad pública. Además, se destacó que 12 de los 18 imputados tienen condenas anteriores. El fiscal regional de O'Higgins, Aquiles Cubillos, sostuvo que la medida cautelar es esencial y está respaldada por la evidencia recopilada en la investigación. Cubillos también indicó que el Ministerio Público está investigando la posible existencia de funcionarios de Carabineros involucrados en el robo y que se están explorando todas las hipótesis sobre el paradero del dinero robado. La prisión preventiva de los imputados busca garantizar que no interfieran con la investigación y evitar riesgos para la seguridad de la sociedad. La investigación sigue en curso para identificar a todos los posibles partícipes del delito y recuperar los fondos sustraídos.
Este martes se llevó a cabo la formalización de 18 personas detenidas por su presunta participación en el robo a la sucursal de la empresa de valores Brinks en Rancagua, ocurrido el pasado viernes. La audiencia reveló detalles sobre la banda criminal, descrita por el Ministerio Público como una “organización criminal interregional” con una estructura “jerarquizada y permanente”. El fiscal regional de O’Higgins, Aquiles Cubillos, presentó los antecedentes del caso ante el tribunal en colaboración con el equipo especializado del OS9 de Carabineros. Cubillos detalló que la banda llevó a cabo múltiples reuniones para planificar el atraco, que resultó en un botín superior a $12 mil millones, monto que aún no ha sido recuperado. Durante el operativo, la banda coordinó la quema de varios vehículos en puntos estratégicos de la ciudad para facilitar su huida, interrumpiendo el tránsito y desviando la atención de las autoridades. En total, se utilizaron 21 vehículos, de los cuales siete fueron incendiados. La investigación preliminar sugiere que la banda estaba compuesta por entre 25 y 30 personas, cada una con un rol específico en la ejecución del plan. Los 18 detenidos enfrentan cargos que incluyen robo con intimidación, asociación criminal, porte ilegal de arma prohibida, siete delitos de incendio, porte de elementos incendiarios, y 19 delitos de receptación de vehículos motorizados.